Visibilidad y Flexibilidad: Claves para servicios de red efectivos durante la pandemia
Por: Chris Boyd, gerente de proyecto para el monitoreo remoto y los Servicios LIFE™ de Vertiv.
La actual pandemia está cambiando la manera en que vivimos y trabajamos de formas innumerables. De la noche a la mañana, millones de personas experimentaron la transición de trabajar o estudiar desde casa, un proceso que ha puesto a prueba las agallas de tecnófobos y tecnófilos por igual. Asimismo, muchas industrias enfrentaron cambios fundamentales en la forma de interactuar con su clientela.
La atención médica y la educación, por ejemplo, tuvieron que cambiar de modelos que dependían considerablemente del contacto personal y directo con los pacientes o estudiantes para recurrir a las interacciones virtuales realizadas en línea. Esto requirió no solo ajustes técnicos masivos, sino también cambios en los comportamientos y la capacitación de los empleados y modificaciones a las directrices en torno a la comunicación en línea, el uso compartido de datos y la protección de la privacidad. Los sistemas y las redes de TI que se consideraran complementarias a las funciones tradicionales de pronto se volvieron absolutamente críticas.
Las organizaciones están añadiendo capacidad al borde de la red y están implementando sistemas y protocolos para gestionar el ancho de banda y reducir la latencia para ofrecer una experiencia del trabajo en casa sin contratiempos. Al mismo tiempo, ven una mayor urgencia para entender sus sitios en el borde de la red y el equipo ubicado ahí. Esto era lo suficientemente desafiante antes del cambio abrupto causado por la pandemia, pero ahora, con más sitios, más aplicaciones, más usuarios y más actividades de misión crítica, resulta más difícil que nunca.
Todas estas circunstancias han acelerado un cambio hacia el borde de la red que ya parecía estar sucediendo a la velocidad de la luz y la industria de servicios de TI está evolucionando para responder a las necesidades de esta nueva normalidad. Existen algunas claves para realizar esta transición de manera efectiva. La primera es la visibilidad. Entender el equipo de red y la infraestructura de potencia y enfriamiento en cada sitio permite que el personal de servicio pueda comprender mejor los problemas emergentes y así, responder con rapidez. Este tipo de monitoreo remoto ya se daba en sitios críticos en el borde de la red antes de la pandemia. Ahora, la demanda de monitoreo remoto y visibilidad es virtualmente universal. La visibilidad remota contribuye a reducir el número de rutas de servicio y asegura que cualquier visita necesaria en el sitio se realice de manera eficiente por un técnico que sabe qué esperar y quién cuenta con todas las partes necesarias para realizar reparaciones.
Un aspecto que ha quedado de manifiesto durante esta pandemia es que la tecnología resulta vitalmente importante, pero no es la única preocupación para las organizaciones que se vieron empujadas a la incertidumbre. Estos negocios también desean trabajar con socios de servicios de confianza que puedan ser flexibles en medio de todo esto. Los contratos de cobertura que estipulan un tiempo de respuesta de 24 horas pueden ser insuficientes en esta nueva realidad. Los contratos de respuesta de cuatro horas, junto con garantías flexibles, pueden proporcionar absoluta tranquilidad.
Cuando los reemplazos o las actualizaciones del equipo son inevitables, los socios que pueden ejecutar rápidamente y minimizar la interrupción entregan valor. Los periodos de inactividad nunca son aceptables, pero son aún menos aceptables cuando todo su negocio cambia a una modalidad en línea. Y, por si fuera poco, estas redes distribuidas, muchas veces no están limitadas por fronteras nacionales, por lo que los socios que pueden gestionar las implementaciones y los servicios globales son más valorados que nunca.
Por décadas, los proveedores de telecomunicaciones han estado gestionando y prestando sus servicios a miles de sitios de acceso a través de sus redes, al tener siempre claro que ninguna llamada puede interrumpirse. Ellos hacen esto con una combinación de visibilidad en la red con ayuda de la tecnología, equipo y arquitecturas estandarizadas, y técnicos de servicio capacitados que conocen sus redes a la perfección. Este es el modelo que deben acoger las organizaciones de servicios de TI.