La respuesta ante el estrés del cambio / Por: Stephen Manley Chief Technology Officer de la División de Protección de Datos y Disponibilidad de EMC
“¿Qué significa para mí?”.
Esa es la pregunta implícita que surge ante las conversaciones de tecnología actuales. Desde el director de TI hasta el administrador de línea, todos quieren saber cómo los afectará la transformación que estamos presenciando con el surgimiento de la nube, big data y la tecnología móvil.
Todos están experimentando niveles de estrés sin precedentes. Nos encontramos en la confluencia de tres olas tecnológicas masivas, donde la arquitectura de cada ola está optimizada para diferentes cargas de trabajo:
ü Servicios tradicionales centrados en el almacenamiento: El equipo de TI crea la infraestructura de aplicaciones uniendo los mejores componentes en su clase de almacenamiento, servidores, redes, virtualización y respaldo.
ü Servicios centrados en la infraestructura convergente: El equipo de TI crea la infraestructura de aplicaciones mediante componentes cada vez más integrados, a fin de dedicar menos tiempo y esfuerzo a unir las piezas.
ü Servicios de datos centrados en la nube: El equipo de TI o un proveedor externo, proporciona una infraestructura de aplicaciones estándar y simple, sin exponer los componentes tradicionales.
También estamos enfrentando nuevos modelos de consumo. Durante décadas, las transacciones de infraestructura de TI se centraron en la compra de equipos físicos. Al final del proceso, el usuario era propietario de algo tangible. Sin embargo, actualmente, existen nuevas opciones: la nube híbrida, la nube pública y la virtualización (por ejemplo, en un centro de datos definido por software).
Las empresas deben elegir el modelo de arquitectura y el modelo de consumo adecuados para sus cargas de trabajo. El resultado: más estrés.
Debido a estos cambios, las funciones y las responsabilidades del personal de TI están cambiando. He observado dos reacciones ante esta realidad. La primera es resistirse al cambio. Estos equipos dicen que los modelos nuevos no proporcionan un “verdadero X” (donde “X” es el servicio que el equipo ofrece); que, simplemente, incorporarán la nueva tecnología a sus herramientas existentes; y que están demasiado ocupados con el funcionamiento del negocio y no pueden distraerse. Estos equipos enfrentan una reorganización constante hasta que responden al cambio o dejan de existir. El segundo enfoque es aceptar el cambio y mejorar los servicios para el negocio. Esto parece un test de inteligencia sencillo, pero los seres humanos complican la cuestión.
Las transformaciones de TI suceden cuando las organizaciones cambian en respuesta a la tecnología. Los equipos de TI cambian a nivel de cada individuo, ya sea cuando una persona redefine su función o cuando los gerentes reemplazan a un miembro del equipo.
Me gustaría ver a los profesionales de TI avanzar en su trayectoria profesional. Hay tres maneras en las que he visto a los administradores de TI ampliar su función con éxito:
ü Incorporación de la transformación: La transformación elimina la tecnología antigua y a los administradores que la gestionan. Si un administrador desea conservar el control de su área tecnológica, debe impulsar la transformación tecnológica (por ejemplo, incorporar el almacenamiento basado íntegramente en tecnología flash para reemplazar el almacenamiento tradicional).
ü Aprendizaje de nuevas capas de tecnología: Dado que las capas de tecnología inferiores ofrecen simplificación y convergencia, existen nuevas oportunidades en las capas superiores de la pila. Los tecnólogos deben especializarse en estas nuevas áreas (por ejemplo, OpenStack, Hadoop y Cloud Foundry).
ü Conexión con el negocio: Los administradores de TI pueden ampliar su perspectiva profesional estableciendo una conexión entre la tecnología y el negocio. Siempre existe la necesidad de traducir las necesidades del negocio en funcionalidades tecnológicas y viceversa. Los miembros del personal del TI orientados a los negocios deben ayudar a satisfacer las necesidades del negocio (por ejemplo, la nube) u ofrecer capas de valor para el negocio inesperadas (por ejemplo, big data).
La transformación de la infraestructura de TI puede ser abrumadora para las organizaciones y para las personas. Si las organizaciones de TI no se incorporan a este nuevo mundo de manera integral, corren el riesgo de verse marginadas. Sin embargo, las organizaciones solo se transforman en la medida en que su personal lo hace.
Al preguntarse “¿Qué significa el cambio para mí?”, los administradores de TI exitosos responden con una palabra: oportunidad.