E-commerce en Perú enfrenta el reto de rentabilizar la entrega rápida en la última milla

Según un informe elaborado por Global Market Insights, el tamaño del mercado global de transporte de entrega de última milla fue de USD 175.3 mil millones en 2023 y se calcula que registrará un tasa de crecimiento anual compuesta de más del 6% entre 2024 y 2032.

En el Perú, este sector alcanzó un valor de 636 millones de dólares en 2023, según datos de la Cámara Peruana de Comercio Electrónico (Capece). Con este crecimiento acelerado surge un desafío logístico clave: cómo hacer rentable la entrega rápida en la última milla, es decir, el tramo final del proceso de distribución que conecta al producto con el consumidor.

La llamada “última milla” representa hasta el 53% del costo total de envío en e-commerce, según datos de Statista, y es también la etapa con mayor incidencia en la experiencia del usuario. “En un entorno donde los consumidores exigen entregas el mismo día o incluso en horas, la presión sobre las empresas logísticas es cada vez mayor” comenta Eduardo Acuña, CEO de Butik.ai, plataforma de e-commerce basada en inteligencia artificial.

Frente a este panorama, los operadores logísticos y plataformas digitales están adoptando tecnologías emergentes y modelos colaborativos para reducir costos y tiempos. Por ello, el CEO de Butik.ai, comparte 3 formas que debemos considerar para hacer optimizar esta ruta del e-commerce:

  • Optimización de rutas mediante IA: Algoritmos avanzados analizan variables como tráfico en tiempo real, clima y proximidad de puntos de entrega para definir rutas más eficientes, lo que reduce el consumo de combustible y mejora la puntualidad.
  • Alianzas estratégicas y modelos híbridos: Muchas empresas están tercerizando parte de su logística con operadores locales o con plataformas de economía colaborativa, lo que permite ampliar cobertura sin elevar significativamente los costos fijos.
  • Vehículos autónomos y lockers inteligentes: Aunque aún en etapa piloto en Perú, ya se exploran soluciones como robots repartidores y casilleros automáticos de retiro, tecnologías que podrían reducir el costo por entrega y disminuir la dependencia de la mano de obra humana. Según GlobeNewswire, el mercado global de vehículos autónomos para delivery podría alcanzar los USD 4.21 mil millones al 2030.

Además, el uso de analítica predictiva y sistemas de gestión de flotas permite anticipar la demanda y adaptar las operaciones con mayor precisión. Esta combinación de eficiencia operativa y tecnología de punta será clave para sostener la promesa de entregas ultrarrápidas sin comprometer la rentabilidad.

En conclusión, el reto no es solo logístico, sino estratégico. Rentabilizar la última milla en un país con desafíos de infraestructura como el Perú exige repensar la cadena de valor del e-commerce. Quienes logren integrar tecnología, agilidad operativa y sostenibilidad estarán mejor posicionados para liderar el mercado digital en los próximos años.