REDUCE LA APARICIÓN DEL ACNÉ CON EL LÁSER NEODIMIO YAG
El acné es una enfermedad inflamatoria y común de la piel en la que los folículos pilosos se tapan con grasa y células muertas, provocando la aparición de espinillas y/o granos que, junto a la interacción con bacterias y hormonas, pueden facilitar su progresión a lesiones más severas como los nódulos y las pústulas. Aunque esta afección es muy común en los adolescentes, puede afectar por igual a personas de todas las edades.
El tratamiento con láser Neodimio YAG permitirá la disminución del proceso inflamatorio del acné, mediante la acción vascular del láser o luz pulsada (IPL). El doctor Erick Torres, del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma, nos contará cómo tratar esta incómoda afección de la piel.
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En primer lugar, el paciente debe acudir al médico especialista para identificar el tipo y severidad del acné que padece, a fin de que se le pueda indicar si seguirá un tratamiento tópico o por vía oral.
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Los tratamientos tienen dos fases:
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Fase activa del acné: Caracterizada por la aparición de comedones, inflamación, nódulos o pústulas. En esta fase, se indicará tratamiento médico a base de cremas o pastillas junto a coadyuvantes como las limpiezas faciales y el láser o IPL (láser no ablativo) para prevenir las secuelas.
- Fase inactiva del acné o secuelas: Donde hay cicatrices atróficas (en forma de pequeñas hendiduras en la piel) y manchas. En esta otra fase, el tratamiento con láser CO2 fraccionado será la mejor opción junto al Q-Swicht para actuar sobre las manchas
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Los nuevos protocolos de tratamiento del acné activo son manejados con tratamiento médico (cremas y pastillas), pero es necesario complementarlo con procedimientos estéticos como: limpiezas faciales y el uso del láser o IPL para prevenir una mayor aparición de cicatrices y manchas, dando mejores resultados.
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El láser Neodimio YAG trabaja las capas de la piel, buscando la pigmentación o mancha para actuar de manera selectiva generando un mayor efecto.
*Se recomienda realizar limpiezas faciales, a modo de complemento, para prevenir la aparición de secuelas mayores.